A veces la vida tiene sorpresas ... a veces si uno es bueno tiene recompensas ;) este relato es real ... si me sucedió a mi o a alguien más, me temo que no se los puedo contar ;)
love, rockets, rock n`roll butterflies, kisses and hugs, Abril
LA CITA
©Copyright trozos de abril 2013
Todos los días a las ocho en punto ella abordaba el tren subterráneo, siempre entre apretujones y alguna que otra mirada lasciva, ella se refugiaba en su imaginación (que aún era infantil, gracias a Dios) imaginaba que el tren era el lomo de un dragón que la internaba a toda prisa en su cueva para mostrarle tesoros, y que en cada parada se topaban con ogros apestosos y malhumurados que debía vencer con algún encantamiento, aunque para ser honestos ella prefería derrotarlos con espadas, porque nunca le había gustado la idea de ser princesa ¡no! A ella le gustaría ser guerrera, un miembro de la corte del rey Arturo, una poderosa bruja o, aún mejor ... ¡un dragón!
Sin embargo sus temerarias fantasías siempre se interrumpían a las ocho con veinte minutos, no solo porque era la estación en la que debía bajar, sino porque todos los días a las ocho con veinte, a los pies de la escalera eléctrica se encontraba con Elvis Presley ... no, no era otra de sus fantasías ... ¡aunque tampoco era por supuesto el Elvis real! solo era un chico cantando los éxitos del Rey al pie de las escaleras en una de tantas estaciones del tren.
Todas las mañanas cientos de personas lo pasaban de largo, algunos le arrojaban una moneda, pero nadie se detenía a escucharlo ... excepto claro. nuestra chica fantasiosa, que se paraba frente a el fascinada viéndolo tocar la guitarra y moviendo la cabeza al ritmo del rock and roll. Y por lo menos durante una canción ella se sentía especial, como si tuviera un concierto VIP y una verdadera leyenda de la música tocara solo para ella, al final de la melodía siempre intercambiaban lo mismo, él, una sonrisa pícara y ella, algunas monedas que depositaba en la palma de su mano rozándola apenas, como un susurro para salir corriendo a toda prisa con la adrenalina impulsando sus pasos para seguir enfrentando la realidad.
Cada mañana al sonar el despertador nuestra chica se ilusionaba por saber que a las ocho con veinte tendría su acostumbrada "cita" con Elvis y que él con su voz y sus jeans ajustados, y esa sonrisa que la sonrojaba, le alegraría el día entero.
Sin embargo, aquella mañana lluviosa de otoño los trenes estaban retrasados y acarreaban más ogros apestosos de lo normal, entre descomunales apretujones y empujones nuestra chica trataba de subir al tren, pero no había manera de que pudiera romper las leyes de la física a menos que se fusionara con todos los ogros y se convirtiera en una asquerosa verruga sobre el lomo de alguno de ellos, así que se resignó a esperar el siguiente tren, y el siguiente y el siguiente ...
Por fin a las nueve con quince, llegó a su estación con el corazón saltándole en el pecho, no había llegado a su cita ... ¿acaso Elvis lo habría notado? ¿se habría preguntado porque su única admiradora no había llegado? ¿por lo menos lo habría notado en lo escaso de sus propinas? Nuestra chica suspiró profundamente ... ¡claro que no! -se dijo a si misma- no había forma de que aquel chico encantador notara siquiera su presencia ¡como iba a notar su ausencia! así que con la cabeza gacha comenzó a subir rápidamente las escaleras eléctricas que a causa de la lluvia no funcionaban, era tarde, y había que enfrentar la realidad sin música de Elvis ni sonrisas coquetas, había que tomar un taxi para compensar el retraso, pero en su prisa, nuestra chica resbaló en los escalones, ya casi podía sentir las miradas burlonas de los pasajeros y la risa del guardia de seguridad, pero entonces un par de brazos fuertes la sujetaron ... ¡era Elvis! con su sonrisa y sus jeans ajustados y su guitarra al hombro, de repente todo sucedió como en las viejas películas de Hollywood, en cámara lenta, el mundo guardó silencio mientras Elvis le daba un beso a nuestra chica ... y ella pensó que a veces estaba bien ser princesa rescatada por un caballero de la era del rock and roll.
Ese fue para nuestra chica un día extraordinario, sin duda o como dirías tú un lúnatico, gótico y loco día ji, ji, jiii... días como estos son los que valen la pena, Abril.
ResponderEliminarTodos tenemos una estación de tren mágica, amiga.
Un abrazo rockero.
los mejores días son aquellos en que podemos robarnos algo más ... en los que le robamos aventuras a la rutina o al miedo o a nosotros mismos :) y si es a ritmo de rock and roll Rayén es aún mejor :) pero como bien dices un día lunático y loco es lo mejor!!!! ;) un abrazo loquigotirockero para ti jajajajaja xoxo abril
EliminarMe gusta mucho Elvis, Abril, tanto que volvi a oirlo otra vez, es que, él aunque este en el más alla igual nos roba el corazón ju,jiajauj :)
EliminarAdemás de Elvis, me gustan los días loquigotirockero, como llamas tu a esos días, que suelen sorprendernos por el motivo que sea.
Que tengas un fin de semana fuera de serie, o sea, de película jiujajauj :)
jajajaja eso un fin de semana fuera de serie, de película como debe de ser:D y claro que Elvis sigue arrancando suspiros jejeje espero que tengas un fin de semana de película loquigoticatockera jajajajaja un abrazo nena :* xoxo abril
EliminarMARAVILLOSO ELVIS, YO ERA MUY CHICA CUANDO FALLECIÓ PERO LO RECUERDO MUCHO, TENÍA UN CARISMA Y UNA PERSONALIDAD ARROLLADORA.
ResponderEliminarPRECIOSO TEXTO AMIGA.
UN BESO GRANDE.
CARIÑOS MILES.
bueno ¿que sería de la vida sin música Luján? nooooo no se puede andar por la vida sin un buen soundtrak no crees? jejeje mil gracias por venir a mis trozos de abril un abrazo xoxo Abril
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